lunes, 15 de abril de 2019

El petróleo recupera terreno en el primer trimestre por los recortes saudíes

Londres, 15 abr (EFE).- Los esfuerzos de Arabia Saudí y sus aliados para recortar su producción, junto con el declive involuntario del bombeo en Venezuela e Irán, han impulsado el precio del crudo en el primer trimestre del año, hasta revertir parte del desplome que registró en la recta final de 2018.

La Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP), liderada por Riad, redujo su bombeo en 543.000 barriles diarios en marzo, hasta quedarse en una producción conjunta de unos 30 millones de barriles diarios (mbd), por debajo de la demanda estimada para el grupo durante este año, de 30,3 mbd.


La OPEP anunció su decisión de acotar sus extracciones a principios del pasado diciembre, y el impacto de la medida se comenzó a notar en el mercado ese mismo mes.

Desde entonces, el petróleo Brent, de referencia en Europa, ha avanzado cerca de un 20 %, hasta superar esta semana los 71 dólares por barril, su máximo nivel en cinco meses.

Los indicadores económicos alentadores que han llegado desde China, así como el optimismo sobre las negociaciones comerciales entre Washington y Pekín, han contribuido a impulsar el precio, aunque los expertos apuntan a las medidas de la OPEP como el principal motor de la recuperación del precio.

"Existen diversos factores para esta tendencia al alza, pero el recorte de Arabia Saudí y la OPEP es con diferencia el componente más relevante. Las sanciones sobre Irán y Venezuela son un complemento que ha incrementado la preocupación por el nivel de oferta", indicó a Efe David Madden, analista de CMC Markets.

El repunte del precio ha puesto en alerta a Estados Unidos, que teme repercusiones negativas en su economía. El presidente estadounidense, Donald Trump, ha solicitado públicamente en varias ocasiones a la OPEP que cambie su estrategia y contribuya a controlar la subida.

Los tuits que envió Trump para tratar de condicionar el mercado lograron que la cotización del petróleo perdiera varios puntos en las horas posteriores a la publicación de sus mensajes, pero en el medio plazo no parecen haber surtido el efecto deseado.

Los analistas, sin embargo, creen que en la segunda mitad del año la posición de Washington puede contribuir a que el cártel petrolero que lidera Arabia Saudí modere el alcance de sus medidas.

La situación de la petrolera estatal saudí Aramco puede contribuir asimismo a la ecuación que determinará el avance del precio del crudo en los próximos meses, según los expertos.

Esta semana, Aramco rompió las previsiones al captar 12.000 millones de dólares (10.650 millones de euros) en su primera emisión internacional de bonos. La demanda por parte de los inversores ha superado los 92.000 millones de dólares (casi 82.000 millones de euros).

"Arabia Saudí va a tener a corto plazo más liquidez que nunca, así que probablemente no va a estar tan interesada en exprimir el mercado para aumentar los precios del crudo. Al mismo tiempo, quieren mantener a Trump de su lado", señaló Madden.

A medida que avance 2019, "podríamos ver un cierto cambio en la posición de la OPEP, o al menos en algunos de los jugadores clave" dentro del cártel, agregó.

De manera involuntaria, la industria estadounidense está contribuyendo asimismo al aumento del precio en el primer trimestre del año.

La producción de petróleo no convencional en Estados Unidos deja de ser rentable a partir de cierto nivel de precios, por lo que la caída que se registró a finales del año pasado obligó a cerrar temporalmente algunas explotaciones.

Las consecuencias de esas clausuras se están notando un tiempo después. En enero, la producción media diaria estadounidense se redujo por primera vez en seis meses, según los últimos datos de la Agencia Internacional de la Energía (AIE).

El aumento de la violencia en Libia y sus efectos sobre las extracciones en la zona ha sido el último de los factores que ha contribuido al alza del precio en las últimas semanas.

Según Madden, el precio Brent todavía tiene recorrido para seguir avanzando, hasta acercarse a la barrera de los 80 dólares por barril, una cota que tocó por última vez en octubre. EFE