Madrid, 27 oct (EFE).- La bolsa española termina la semana con una caída del 0,25 por ciento y por debajo de 10.200 puntos por la declaración de la república independiente de Cataluña el viernes.
Un día antes se aventuraba un resultado semanal distinto, con una subida cercana al 1 por ciento, por el alza de los bancos y la caída del euro por debajo de 1,16 dólares después de que el Banco Central Europeo (BCE) anunciara el recorte mensual del programa de compra de deuda a partir del próximo mes de enero.
La decisión del BCE de rebajar de 60.000 a 30.000 millones mensuales la compra de deuda depreció al euro e impulsó a la banca, porque supone el comienzo del endurecimiento de la política monetaria y servirá para restablecer los márgenes del sector. La autoridad monetaria dijo que respaldaría el crecimiento económico.
En la depreciación del tipo de cambio del euro respecto al dólar (al cierre de la sesión bursátil el viernes se situaba en 1,158 unidades, precio de mediados de julio) también influyó el crecimiento del 3 por ciento del PIB estadounidense el tercer trimestre, lo que acelerará la subida de los tipos de interés en su economía.
La segunda semana consecutiva a la baja de la bolsa también ha estado condicionado por la mala acogida dada por los inversores a muchos resultados empresariales del tercer trimestre, entre los que destacaron los de DIA o IAG.
El mercado nacional fue incapaz de contagiarse de los máximos históricos de Wall Street (el índice Dow Jones de Industriales se acercó a 23.500 puntos) o de los elevados precios de Tokio, que se situó en niveles de 1995, después de la victoria electoral de Shinzo Abe.
En este período se conocieron algunas estadísticas favorables, como la mejora de la confianza inversora en Alemania (índice IFO) o el desmesurado repunte de la venta de viviendas nuevas en los Estados Unidos el mes pasado el 18,9 por ciento.
Estos días también aconteció la subida del precio del petróleo Brent por encima de 60 dólares el barril, precio de julio de 2015, por la posibilidad de que la OPEP y Rusia concierten un recorte de la producción.
La mayoría de los mercados europeos, por influencia de la caída de la moneda única, obtuvieron un gran resultado en este ciclo, ya que París ganó el 2,27 por ciento, mientras que Fráncfort subió el 1,74 por ciento y Milán el 1,42 por ciento. La cotización de la libra afectó a Londres, que bajó el 0,24 por ciento.
De otros mercados del mundo, Tokio subió el 2,57 por ciento, en tanto que Wall Street se revalorizaba alrededor del 0,5 por ciento.
En cuanto a la evolución semanal de la bolsa española bajaron veintitrés, repitió cotización uno (Siemens Gamesa) y bajaron diez.
La mayor caída, el 8,33 por ciento, correspondió a DIA tras presentar sus cuentas de los nueve primeros meses del año, en los que su beneficio cayó casi el 12 por ciento.
Por su parte, la aerolínea IAG cedió el 4,18 por ciento tras anunciar que su resultado entre enero y septiembre creció el 5,6 por ciento, hasta 1.567 millones, además de ser afectada por el alza del crudo, en tanto que Mediaset bajó el 3,84 por ciento por la débil evolución de la inversión publicitaria y la competencia.
Técnicas Reunidas comandó las subidas del parqué nacional esta semana al ganar el 3,58 por ciento por la posibilidad de que resulte adjudicataria de un suculento proyecto en Arabia Saudí y por el alza del crudo, en tanto que Grifols se revalorizó el 2,28 por ciento y Banco Santander el 1,75 por ciento después de sorprender con sus resultados (ganó el 10 por ciento más, hasta 5.077 millones).
Del resto de los grandes valores solo subieron Repsol, el 1,67 por ciento, por el petróleo, e Inditex, el 0,87 por ciento, animado por la bajada del euro, en tanto que Telefónica cedió el 1,94 por ciento, perjudicada por sus cuentas (su beneficio creció el 9,6 por ciento y se situó en 2.439 millones; BBVA el 1,71 por ciento, aunque ganó 3.449 millones, el 23,3 por ciento más, mientras que Iberdrola cedió el 0,3 por ciento.
