WASHINGTON (Reuters) - El crecimiento del empleo en Estados Unidos casi se estancó en febrero, con apenas 20.000 puestos nuevos de trabajo creados, por una contracción de las nóminas en construcción y minoristas, lo que podría elevar el temor a una fuerte desaceleración en la actividad económica.
El crecimiento del empleo informado el viernes por el Departamento del Trabajo fue el más débil desde septiembre de 2017, pero probablemente subestima la salud del mercado laboral, ya que otros datos del reporte fueron sólidos.
La tasa de desempleo volvió a bajar a menos del 4 por ciento y el crecimiento anual de los salarios fue el mejor desde 2009. Además, los informes de diciembre y enero se revisaron para mostrar que se crearon 12.000 puestos más de los que se reportaron originalmente. (Gráfico: tmsnrt.rs/1Ofxrea)
Pese a todo, la economía -que en julio cumplirá diez años de expansión, la más larga desde que existen registros- se está desacelerando y el debilitamiento del crecimiento del empleo respalda el enfoque “paciente” de la Reserva Federal frente a nuevas alzas de las tasas de interés este año.
“La fuerte desaceleración en el crecimiento de las nóminas laborales en febrero aporta más pruebas de que el crecimiento económico se ralentizó en el primer trimestre”, dijo Michael Pearce, economista de Capital Economics en Nueva York. “Esto añade peso a nuestra visión de que la Fed no subirá las tasas de interés este año”.
Economistas consultados por Reuters esperaban un alza de 180.000 en las nóminas no agrícolas en febrero y que la tasa de desempleo cayera al 3,9 por ciento.
El dato reflejó probablemente el desvanecimiento del impulso relacionado con el clima de los dos meses previos, así como una mayor escasez de trabajadores. La liquidación del mercado bursátil y el aumento de los rendimientos de los bonos del Tesoro a fines de 2018, que ajustaron las condiciones del mercado financiero, también fueron posibles factores.
Si bien la economía creció un 2,9 por ciento en 2018, su mejor desempeño en tres años, perdió impulso a fin de año. Las ventas minoristas, la construcción, el gasto empresarial y las exportaciones se debilitaron en diciembre, bajando el ritmo de crecimiento de la economía.
Pese a la debilidad de la contratación el mes pasado, la tasa de desempleo bajó dos décimas, al 3,8 por ciento, ya que volvieron a sus puestos los trabajadores del Gobierno federal que se quedaron temporalmente sin trabajo durante los 35 días que duró la paralización parcial. Reuters
El crecimiento del empleo informado el viernes por el Departamento del Trabajo fue el más débil desde septiembre de 2017, pero probablemente subestima la salud del mercado laboral, ya que otros datos del reporte fueron sólidos.
La tasa de desempleo volvió a bajar a menos del 4 por ciento y el crecimiento anual de los salarios fue el mejor desde 2009. Además, los informes de diciembre y enero se revisaron para mostrar que se crearon 12.000 puestos más de los que se reportaron originalmente. (Gráfico: tmsnrt.rs/1Ofxrea)
Pese a todo, la economía -que en julio cumplirá diez años de expansión, la más larga desde que existen registros- se está desacelerando y el debilitamiento del crecimiento del empleo respalda el enfoque “paciente” de la Reserva Federal frente a nuevas alzas de las tasas de interés este año.
“La fuerte desaceleración en el crecimiento de las nóminas laborales en febrero aporta más pruebas de que el crecimiento económico se ralentizó en el primer trimestre”, dijo Michael Pearce, economista de Capital Economics en Nueva York. “Esto añade peso a nuestra visión de que la Fed no subirá las tasas de interés este año”.
Economistas consultados por Reuters esperaban un alza de 180.000 en las nóminas no agrícolas en febrero y que la tasa de desempleo cayera al 3,9 por ciento.
El dato reflejó probablemente el desvanecimiento del impulso relacionado con el clima de los dos meses previos, así como una mayor escasez de trabajadores. La liquidación del mercado bursátil y el aumento de los rendimientos de los bonos del Tesoro a fines de 2018, que ajustaron las condiciones del mercado financiero, también fueron posibles factores.
Si bien la economía creció un 2,9 por ciento en 2018, su mejor desempeño en tres años, perdió impulso a fin de año. Las ventas minoristas, la construcción, el gasto empresarial y las exportaciones se debilitaron en diciembre, bajando el ritmo de crecimiento de la economía.
Pese a la debilidad de la contratación el mes pasado, la tasa de desempleo bajó dos décimas, al 3,8 por ciento, ya que volvieron a sus puestos los trabajadores del Gobierno federal que se quedaron temporalmente sin trabajo durante los 35 días que duró la paralización parcial. Reuters