Madrid, 30 dic (.).- El mercado ibérico ha cerrado 2016, con pérdida del 2,01 %, con lo que suma dos años consecutivos a la baja, aunque este año bastante menores que las de 2015, cuando cayó el 7,15 %.
La Bolsa española ha subido hoy un 0,27 % pero ha certificado lo que ya se adivinaba desde hace días: cierra 2016 en rojo, con una caída del 2,01 %, y ya suma dos años consecutivos de pérdidas.
Con el rebote que vivió el IBEX 35 a comienzos de mes, se llegó a pensar en terminar el año positivo, una hazaña prácticamente imposible porque la caída acumulada era de casi el 9 %.
El mercado ibérico ha cerrado 2016, un año marcado por hechos imprevistos y sobresaltos, con un retroceso del 2,01 %, con lo que suma dos ejercicios consecutivos de pérdidas, aunque este año bastante menores que las de 2015, cuando se dejó el 7,15 %.
Sin embargo, el selectivo español no se dio por vencido, e inició una remontada que le ha valido para cerrar el mejor mes del año y el mejor diciembre desde hace veinte, con unas ganancias del 7,64 %, hasta los 9.352,10 puntos.
No lo tuvo fácil la Bolsa española, en un año en el que se han sucedido los obstáculos, como el "brexit", los bancos centrales, la volatilidad del crudo, China, la incertidumbre política española, o la mala situación de la banca italiana.
De vuelta a España, cuatro de los seis valores más capitalizados del IBEX han cerrado en positivo: Repsol (MC:REP) ha ganado el 39,32 % en 2016; Santander (MC:SAN), el 14,36 %; Inditex (MC:ITX), el 4,37 % y BBVA (MC:BBVA), el 1,63 %.
Por el contrario, Telefónica (MC:TEF) ha perdido el 6,49 % e Iberdrola (MC:IBE), el 0,28 %.
El farolillo rojo del año del IBEX 35 ha sido Banco Popular (MC:POP), que se ha dejado el 65,83 %, asediado por los bajistas y ante la pérdida de confianza de los inversores.
La compañía más alcista ha sido la acerera ArcelorMittal (MC:MTS), que gracias a la mejoría de las materias primas, ha rebotado el 132,69 % anual, una espectacular recuperación tras un mal 2015.
Así, la Bolsa española cierra el año con ligeras pérdidas, pero da comienzo a otro en el que los expertos aseguran que, si no se producen sobresaltos políticos -elecciones en Francia y Alemania, negociaciones para el "brexit", puesta en marcha de la administración Trump-, se podría por fin terminar con balance positivo.
