lunes, 16 de marzo de 2020

UE evaluará "bazuca fiscal" del fondo de rescate contra el virus

BRUSELAS, 16 mar (Reuters) - Los ministros de Finanzas de la zona euro debatirán el lunes el posible uso de un fondo de emergencia de la UE por valor de más de 400.000 millones de euros (447.600 millones de dólares) para hacer frente a la crisis económica provocada por el brote de coronavirus, dijeron las autoridades.

Las conversaciones se celebrarán ante los llamamientos de los parlamentarios de la UE para que se permita un uso excepcional del Mecanismo Europeo de Estabilidad (MEE) para hacer frente a la crisis sanitaria y económica sin precedentes.

El arsenal del Mecanismo Europeo de Estabilidad (MEDE), el más poderoso fondo de rescate de la UE, podría proporcionar el mayor impulso fiscal prometido hasta ahora a nivel de la UE. Sin embargo, muchos siguen considerando que esa medida puede ser prematura y que puede costar lograr un consenso al respecto.

Las fuentes consultadas admitieron que se estaban examinando opciones extraordinarias dadas las circunstancias excepcionales, ya que se prevé que tanto las economías de los 27 países de la UE como las de los 19 miembros de la zona del euro entren en recesión este año.

El fondo se diseñó para ayudar a los países que perdieran el acceso al mercado, pero eso no es un problema por el momento ya que los rendimientos de la deuda pública son todavía relativamente bajos. Pero el MEDE podría ayudar a impulsar la confianza, dijo un responsable de la zona euro a Reuters, quien añadió que se está estudiando cómo podría llevarse a cabo.

“Los gobiernos europeos deberían comprometerse a dar acceso a las líneas de crédito preventivas del Mecanismo Europeo de Estabilidad a los países del euro que están bajo presión en los mercados de capital debido a los efectos económicos de la crisis del coronavirus”, dijo Sven Giegold, un parlamentario alemán que dirige los asuntos financieros del grupo de los Verdes en el Parlamento Europeo.

El MEDE, que desempeñó un papel crucial en el rescate de los estados de la zona euro en 2010-2012 durante la crisis de la deuda, tiene actualmente una capacidad de préstamo de 410.000 millones de euros. Sin embargo, el acceso a sus recursos está vinculado a condiciones fiscales estrictas, lo que haría que el fondo no sirviera de nada en la crisis actual.

Por ello, los legisladores piden una utilización excepcional del mecanismo, que según Giegold “no debería estar vinculado a ninguna nueva medida de austeridad”.

“El potencial que ofrece el Mecanismo Europeo de Estabilidad debe ser utilizado a través de una línea de crédito obligatoria para financiar un instrumento de inversión común”, dijo el lunes el grupo socialista del Parlamento Europeo, el segundo más grande del parlamento, en un comunicado.

SEÑAL DE CATÁSTROFE

No obstante, Markus Ferber, coordinador de asuntos financieros de la agrupación de centro-derecha, la más grande del Parlamento de la UE, adoptó un tono cauteloso.

“El MEDE es una herramienta de gestión de crisis y si abrimos los fondos del MEDE, esto también podría enviar una señal de inminente catástrofe a los mercados”, declaró.

Ferber dijo que las líneas de crédito preventivas del MEDE requerirían la aprobación de los parlamentos nacionales, incluido el Parlamento alemán, que en el pasado fue muy reacio al desbloqueo de estos fondos.

“Me sorprendería que viéramos un paso así tan pronto”, dijo Ferber a Reuters.

Es previsible que en la videoconferencia del lunes los ministros de finanzas de la UE también debatan un paquete de medidas financieras que propuso el viernes la Comisión Europea.

En el marco de este programa, Bruselas ofreció reorientar 37.000 millones de euros de los fondos de la UE a los sectores más necesitados, para permitir a los Estados tener mayores déficits presupuestarios y garantizar hasta 8.000 millones de euros para préstamos baratos a las empresas más pequeñas.

Estas medidas deben ser aprobadas por los Gobiernos y los legisladores de la UE.

Los Gobiernos nacionales también han prometido una serie de medidas de ayuda. Berlín prometió medio billón de euros en garantías para las empresas alemanas, mientras que Italia, el país más afectado hasta ahora, ha planteado medidas para los sectores afectados por la crisis por un valor de 25.000 millones de euros y se comprometió a ir más allá. Reuters