NUEVA YORK (Reuters) - Los rendimientos de los bonos del Tesoro subieron el jueves, con los de largo plazo en máximos de casi 11 semanas y a la par de la deuda alemana, antes de un reporte de empleo en Estados Unidos que podría terminar de cimentar las expectativas de un alza de tasas por parte de la Reserva Federal.
* Los retornos de los bonos a corto plazo, en tanto, avanzaron a su mayor nivel en más de siete años y medio ante las apuestas de un pronto ajuste monetario.
* Un decente crecimiento del empleo, junto con un alza en el aumento de los salarios en febrero, llevaría a las autoridades de la Fed a cumplir con lo que una serie de ellos señalaron la semana pasada sobre un incremento del costo del crédito en su reunión de dos días la próxima semana, dijeron analistas.f
* Los futuros de tasas de interés implican que los operadores dan una probabilidad del 91 por ciento a que la Fed subirá las tasas en un cuarto de punto porcentual a 0,75-1,00 por ciento, según la herramienta FedWatch de CME Group.
* Analistas consultados por Reuters esperan que los empleadores estadounidenses hayan sumado 190.000 puestos de trabajo el mes pasado, menos que los 227.000 de enero, y que el promedio de pago por hora haya aumentado un 0,3 por ciento, tras una baja del 0,3 por ciento en enero.
* Hacia el cierre de los negocios en Nueva York, el retorno de la deuda referencial a 10 años subía 4 puntos básicos a 2,594 por ciento, tras llegar a su máximos desde el 16 de diciembre a 2,607 por ciento, según datos de Reuters.
* El rendimiento a dos años, más sensible a las opiniones de los operadores sobre la política monetaria de la Fed, ganaron casi 2 puntos básicos a 1,371 por ciento, luego de alcanzar 1,379 por ciento, sus máximos desde agosto del 2009.
* En las operaciones de más temprano, los rendimientos de los bonos estadounidenses y alemanes subieron luego de que el presidente del Banco Central Europeo, Mario Draghi, reconoció una mejoría económica en la zona euro, lo que podría justificar menos apoyo monetario hacia el futuro.
* Los comentarios de Draghi y el tibio panorama que dio el BCE sobre crecimiento e inflación en la zona euro generaron la venta de los bonos alemanes, lo que se extendió a la deuda estadounidense. Reuters