jueves, 2 de junio de 2016

BCE eleva previsiones sobre inflación en zona euro

Viena, 2 jun (EFE). - El presidente del Banco Central Europeo (BCE), Mario Draghi, dijo hoy que la entidad monetaria no quiere que desaparezca el dinero en efectivo pese a haber decidido recientemente no producir más el billetes de 500 euros, algo que ha creado confusión.

En la rueda de prensa tras la reunión del consejo de gobierno, que se celebró en Viena, Draghi dijo que "nuestra posición sobre los billetes de 500 euros no tiene nada que ver con la abolición del efectivo".

"Sino que más bien estamos sustituyendo los billetes de 500 euros" por otros de otras denominaciones, dijo el presidente del BCE.

Asimismo el BCE publicó hoy también una carta de Draghi al eurodiputado socialista Jonás Fernández en la que el presidente del BCE le dice que "desearía subrayar que la decisión relativa al billete de 500 euros no trata de limitar el efectivo".

"El BCE no tiene intención de eliminar el dinero físico, por las razones expuestas", añadió Draghi en la carta.

El 4 de mayo de 2016 el consejo de gobierno del BCE decidió "poner fin permanentemente a la producción del billete de 500 euros y no incluirlo en la serie Europa, dada la preocupación por que los billetes de esa denominación puedan facilitar la comisión de actividades ilícitas", explicó el presidente de entidad.

El BCE va a mantener las demás denominaciones, de 5 a 200 euros.

Draghi responde también en la carta que "el efectivo es con diferencia el medio de pago más utilizado para las transacciones minoristas en la zona del euro en cuanto al número de operaciones, aunque el valor de dichas operaciones es mucho menos significativo". "El efectivo tiene ventajas específicas, como la posibilidad de saldar deudas de forma inmediata y directa sin necesidad de evaluar la solvencia de la contraparte o disponer de una infraestructura técnica", según la carta de Draghi firmada en Fráncfort el 31 de mayo de 2016 . EFE Yahoo Finanzas

BCE eleva marginalmente sus previsiones sobre crecimiento e inflación de zona euro

El Banco Central Europeo aumentó ligeramente el jueves sus expectativas de crecimiento e inflación para la zona euro este año, aunque mantuvo sin cambios la tasa de depósitos bancarios que ya se encuentra en terreno negativo y dijo que seguiría adelante con su programa extraordinario de estímulos.

En declaraciones tras la reunión del Consejo de Gobierno del BCE en Viena, el presidente del organismo, Mario Draghi, dijo que espera que las tasas permanezcan en los actuales niveles o incluso más bajos hasta mucho tiempo después del fin de su programa de compras de activos, que debería extenderse al menos hasta marzo del 2017.

"La recuperación económica del área del euro sigue siendo afectada por las débiles perspectivas de crecimiento de los mercados emergentes, los ajustes necesarios de la hoja de balance (...) y el lento ritmo de la implementación de las reformas estructurales", declaró a periodistas.

"Se esperan estímulos adicionales (...) a partir de las medidas de política monetaria que aún deben ser implementadas y que contribuirán a reequilibrar los riesgos para el panorama del crecimiento", sostuvo.

La inflación ha incumplido durante años la meta del BCE de casi un 2 por ciento y el elevado desempleo impide el aumento de los salarios, mientras que la enorme carga de deuda asfixia la inversión y la demanda de bienes y servicios sigue siendo débil. Los bajos precios del petróleo deterioran aún más el panorama.

No obstante, el crecimiento de la zona euro en el primer trimestre superó todas las expectativas, lo que llevó a un aumento de la confianza en la economía, a un sorpresivo incremento de la inversión y a un consumo robusto, por lo que el bloque se encuentra en su mejor posición desde el final de la crisis financiera global.

Aún así, el comunicado del BCE destacó cuán frágil sigue siendo la recuperación. Draghi mencionó entre los riesgos latentes la desaceleración de la economía global y el posible impacto del referendo del 23 de junio que celebrará Reino Unido para decidir si abandona o no la Unión Europea.

BCE MANTIENE POLÍTICA DE TASAS NEGATIVAS

El BCE elevó las proyecciones de crecimiento de la zona euro en 2016 a 1,6 por ciento este año, desde el 1,4 por ciento estimado en marzo. Además, mantuvo el cálculo de 1,7 por ciento de expansión en 2017 y recortó la cifra a 1,7 por ciento en el 2018, frente a la previsión anterior de 1,8 por ciento.

El organismo aumentó también su proyección sobre la inflación en 2016 a 0,2 por ciento desde 0,1 por ciento, citando factores que incluyen el efecto base del reciente avance de los precios del crudo.

Igualmente, el BCE mantuvo sin cambios su tasa de depósitos bancarios, que ahora es vista como su principal herramienta, en -0,40 por ciento. El tipo de refinanciamiento clave, que fija el costo de crédito en la economía, permaneció sin cambios en 0 por ciento, mientras que la tasa sobre créditos marginales a bancos quedó en 0,25 por ciento.

La decisión de mantener las tasas referenciales sin cambios era una medida esperada por los 65 analistas consultados por Reuters, luego de que el BCE profundizó el recorte de los tipos en marzo, anunció la compra de bonos corporativos y dio a conocer un esquema de créditos para los bancos ultra barato.

Mediante compras de activos por 1,74 billones de euros (1,94 billones de dólares) y tasas de interés negativas, el BCE intenta impulsar la inflación, que ha permanecido en rojo durante meses, aumentando el riesgo de que el bloque de 19 países se sumerja en una espiral de deflación. El banco añadió que iniciará la compra de los bonos corporativos el 8 de junio. Reuters