BRASILIA (Reuters) - El banco central brasileño pronosticó el martes que probablemente la inflación alcance su punto máximo en el segundo trimestre de 2019 antes de dirigirse hacia su objetivo, y agregó que la inflación subyacente está en niveles “apropiados”.
Esto sugeriría que una reciente aceleración de los precios por encima del punto medio del rango meta 2018 no haría que el banco subiera las tasas de interés pronto, luego de que la victoria del diputado de extrema derecha Jair Bolsonaro en la elección presidencial redujo los temores de una venta masiva de divisas.
“Los cambios recientes en los precios relativos, en un contexto de expectativas inflacionarias ancladas, parecen haber contribuido a elevar la inflación a niveles compatibles con las metas, sin plantear riesgos para el mantenimiento de la inflación en estos niveles una vez que tales ajustes de precios relativos hayan tenido lugar”, dijo la entidad en el acta de la reunión de política monetaria de la semana pasada.
El banco central brasileño mantuvo el miércoles su tasa de interés de referencia Selic en 6,50 por ciento, un mínimo histórico, y aseguró que los riesgos de una aceleración de la inflación han disminuido.
Esto parecía apuntalar el avance del real a un máximo de cinco meses, ya que los inversores apuestan a que Bolsonaro, que eligió a un banquero capacitado en la Universidad de Chicago como su posible ministro de Economía, implementará reformas de libre mercado y frenará un creciente déficit presupuestario.
Un sondeo reciente de Reuters indicó que es probable que el real se mantenga en los niveles actuales en los próximos meses.
Una moneda más fuerte podría reducir los precios de importación, aliviando la tasa de inflación oficial. El banco central tiene como objetivo una inflación de 4,5 por ciento en 2018 y de 4,25 por ciento en 2019, más/menos 1,5 puntos porcentuales.
Sin embargo, gran parte del reciente aumento de la inflación se debió a efectos puntuales como la escasez provocada por una huelga de camioneros en todo el país o por mayores costos de energía. Cuando se eliminaron los componentes volátiles, la inflación ha rondado el 3,5 por ciento.
El banco central ha dicho varias veces que no existe una “relación mecánica” entre las sacudidas de precios y la política monetaria. Según el acta, el banco eliminará ese lenguaje de sus comunicados desde la reunión de diciembre, “entendiendo que esto no debe interpretarse como un cambio en la conducta de la política monetaria”. | Reuters