
Durante el periodo 2021-2027, se recortarían los subsidios agrícolas, el ítem único más grande, en un 5 por ciento, y se crearía un impuesto nuevo a los plásticos. También gastaría más en investigación y tecnología, ayuda internacional, estabilidad de la zona euro y compensaciones por pérdidas de trabajos por la apertura comercial, entre otras materias.
También introduciría un nuevo mecanismo que penaliza a los países -principalmente a los excomunistas- en los que los gobiernos rompan las normas de la UE respecto a la libertad judicial y el rol de la ley. Eso podría llevar a que parte de su necesaria financiación quede paralizada.
“Tras el retiro de Reino Unido de la UE, el producto interno bruto de la zona euro representará más del 85 por ciento del PIB total de la UE”, dijo la Comisión en un comunicado.
“Esta es la razón por la cual las herramientas para fortalecer la Unión Económica y Monetaria no deben estar separadas sino que deben ser parte de la arquitectura financiera general de la Unión”, agregó el brazo ejecutivo de la UE. Reuters