NUEVA YORK (Reuters) - Los precios del petróleo cayeron el miércoles debido a una menor demanda luego de que las inundaciones y daños provocados por la tormenta tropical Harvey obligaron al cierre de casi un cuarto de la capacidad de refinación de Estados Unidos, lo que a su vez llevó los futuros de la gasolina a máximos en dos años.
* Refinerías con una producción combinada de al menos 4,4 millones de barriles por día -casi un 24 por ciento de la producción local- mantenían paralizada su actividad, según estimaciones de Reuters y reportes de empresas. El reinicio de operaciones podría tomar una semana o más.
* El crudo Brent perdió 1,14 dólares, o un 2,19 por ciento, a 50,86 dólares por barril, mientras que el petróleo referencial estadounidense cayó 48 centavos, o un 1,03 por ciento, a 45,96 dólares por barril.
* Los futuros de la gasolina en Estados Unidos subieron un 5,4 por ciento, a 1,8847 dólares por galón luego de tocar máximos desde julio de 2015 a 1,914 dólares. Los del diésel avanzaron un 0,47 por ciento a 1,6738 dólares por galón, tras tocar máximos desde enero a 1,7161 dólares.
* “El crudo siempre es más fácil de reemplazar que los productos”, dijo Olivier Jakob, analista de Petromatrix. “Si las refinerías permanecen cerradas por más de una semana o 10 días, va a ser muy problemático”, agregó.
* Harvey tocó tierra el viernes como el huracán más poderoso que ha afectado a Texas en más de 50 años, y provocó la muerte de al menos 17 personas. Además del cierre de refinerías, paralizó la producción de 1,4 millones de barriles diarios de crudo, un 15 por ciento del bombeo total, según Goldman Sachs.
* El mercado ignoró las cifras de inventarios semanales de petróleo divulgadas por la Administración de Información de Energía (EIA), debido a que reflejaron las existencias previas a la tormenta.
* Las existencias de petróleo perdieron 5,4 millones de barriles en la semana que terminó el 25 de agosto, frente a expectativas de analistas de una reducción de 1,9 millones de barriles. La tasa de utilización en refinerías trepó a 96,6 por ciento, el mayor nivel desde 2005, una cifra que caerá bruscamente por la tormenta. Barril