Ciudad de México, 20 de julio, 2016 (Reuters). El Fondo Monetario Internacional (FMI) mejoró las perspectivas económicas para América Latina y el Caribe de este año y el próximo, pero sugirió fortalecer la posición fiscal en la región mientras prevalece la incertidumbre financiera tras el "Brexit".
La economía de la región podría achicarse este año un 0.4 por ciento, un mejor cálculo que la contracción de un 0.5 por ciento anticipado en la revisión del FMI de abril, dijo el director del Departamento del Hemisferio Occidental del organismo, Alejandro Werner, en un blog publicado el miércoles.
Hacia el 2017, la economía de América Latina y el Caribe podría crecer un 1.6 por ciento, de acuerdo con el FMI.
El prestamista internacional recortó el martes su proyección del crecimiento económico global para los próximos dos años, citando la incertidumbre generada por la decisión del Reino Unido de abandonar la Unión Europea.
Werner dijo que pese a que el vínculo comercial de América Latina con el Reino Unido es reducido, la región está expuesta a una desaceleración más generalizada por la vía de vínculos financieros y a la volatilidad del sentimiento de los inversionistas.
"Los frecuentes episodios de aumento de la volatilidad del mercado, si bien efímeros, son un constante recordatorio de que las condiciones favorables del mercado pueden trastocarse de la noche a la mañana", dijo Werner.
Ante la mayor volatilidad, sobre todo en los precios de las acciones y los tipos de cambio, Werner dijo que la flexibilidad cambiaria continúa siendo la primera línea de defensa.
Además, debido a que el espacio fiscal sigue siendo limitado en la mayoría de los países de la región, Werner dijo que es vital preservar los márgenes de políticas en caso de que se materialicen los riesgos.
"En los países con pesadas cargas de deuda y fuertes presiones del mercado se requiere acelerar el ritmo del ajuste", dijo Werner citando países como Brasil, para el que espera una contracción de un 3.3 por ciento, menos drástica que en el reporte anterior.
En el caso de México, la segunda mayor economía de la región, Werner espera que conserve una expansión moderada, del 2.5 por ciento este año, y sugirió al país que avance con su consolidación fiscal planeada y la reestructura de la petrolera estatal Pemex.